El primer día de trabajo para todos es una experiencia que puede generarnos mucha ansiedad.
La adaptación a un nuevo empleo puede tardar varios días, semanas y hasta meses, ya que esto implica acomodarse a nuevos horarios, nuevos compañeros, nuevo ambiente laboral y lo más importante: a un nuevo jefe.
Bien por decisión propia o por necesidad, el nuevo trabajo será una experiencia que te ayudará a crecer como profesional, día a día aprenderás cosas nuevas lo que te permitirá adquirir habilidades y competencias que te enriquecerán como persona.
Hay varios aspectos que debes tener en cuenta en tu primer trabajo, tales como la puntualidad con los horarios y la presentación personal, ya que esto hablará bien de ti. Pero también es importante que demuestres responsabilidad y compromiso. No sirve de nada cumplir con los horarios, si el desempeño no es bueno.
Debes tener claro que cometer errores es parte del proceso, por lo que no debes angustiarte si las cosas no resultan como quieres. Lo desconocido asusta, pero es esencial confiar en lo que sabes, en las capacidades y en la razón por la que llegaste ahí. Lo fundamental es tener las ganas de aprender y avanzar.
La integración con tus compañeros de trabajo es fundamental. Sociabiliza desde el principio, por ejemplo, en los descansos o a la hora de la comida, puede ser una buena ocasión para conocer a tu equipo de trabajo.
Te compartimos algunos consejos que te podrán ser de gran utilidad:
1. Confía en tus capacidades: es importante tener una actitud positiva y alerta para aprender. Tener confianza en que paulatinamente irá mejorando tu desempeño, ya que serás capaz de automatizar los procesos y tendrás la confianza suficiente para aportar y ser proactivo en el día a día. Demuestra que eres un buen profesional, hazlo de la mejor manera posible, pero no cambies tu forma de ser por agradar a los demás.
2. Pon atención y anota todo: debes intentar estar atento, oír y aprender. Anota todo lo que expliquen, desde la hora de almuerzo, hasta la clave de acceso de tu nuevo e-mail, así podrás consultar tu cuaderno cada vez que no recuerdes un proceso o algún nombre de persona.
3. Saluda a todos los de la empresa: no esperes a que te saluden, recuerda que nadie te conoce. Sé el primero en decir “hola”, verás lo rápido que te comenzarán a identificar tus compañeros. Además, te verán como una persona accesible y cordial.
4. Apóyate en tus compañeros: es necesario que te tomes todo con calma y vayas poco a poco cumpliendo tus obligaciones, si necesitas ayuda, apóyate en tus compañeros y superiores, sobre todo en aquellos que desde un principio te abrieron las puertas y te ofrecieron respaldo.